viernes, 15 de febrero de 2013

INTERCEPTAN METEORITO EN RUSIA


Aunque la información es muy reciente, parece ser que Rusia habría interceptado  un meteorito que ha caído esta madrugada en la región de los Urales, cerca de Kazajstan, a través del sistema de defensa aérea de Urzhumka, por lo que se habría desintegrado y habría caído sobre las ciudades de Chelyabinsk, Sverdlovsk y Tyumen,según informa la cadena Rusia Today. El trozo más grande del objeto, del que no ha trascendido el tamaño, habría caído en la región de Chelyabinsk.

La información no parece ser aun muy clara según las pocas fuentes podría haber hasta 250 heridos graves por el incidente, otras fuentes informan que solo se habrían producido heridos leves por ruptura de cristales.

El ministerio de Interior ruso, sin embargo, ha comparecido en rueda de prensa para confirmar el hecho y para anunciar que varias personas han resultado heridas al romperse los cristales de las ventanas debido a la caída del meteorito.

El meteorito cayó a unos 80 kilómetros de la ciudad de Satka, cabecera del distrito del mismo nombre, sobre las 09:20 hora local (04:20 hora española), dijo un portavoz de esa cartera a la agencia oficial rusa RIA-Novosti. "En muchas de las casas de Satkí, así como en algunos edificios de Cheliábinsk (capital de la región homónima), saltaron los cristales de la ventanas", dijo el portavoz.

Los servicios de emergencia, por su parte, han confirmado también el suceso y han afirmado, en declaraciones a la agencia estatal de noticias RIA-Novosti que "Los datos preliminares apuntan a que se ha producido una explosión a 10.000 metros de altura.

Los residentes de las zonas afectadas dicen que se ha escuchado una gran explosión y un temblor similar a un terremoto. La ciudad ha quedado sin conexión telefónica y a Internet.

Las fuerzas de seguridad de Chelyabinsk están en máxima alerta y han puesto en marcha un operativo especial para proteger las infraestructuras estratégicas. Además, han evacuado el centro de la ciudad y han ordenado a la población que permanezca en sus casas.

El suceso parece estar relacionado con  el asteroide 2012 DA14, de entre 45 y 95 metros de diámetro, que se prevé que a las 20:25 del viernes pase cerca de la Tierra, a unos 27.000 kilómetros de distancia.

Aunque las autoridades rusas lo han descartado, otras versiones -recogidas por los medios de comunicación- apuntan a que podría deberse a un accidente de una aeronave militar o incluso al lanzamiento de un misil.
  
La caída del cuerpo celeste se acompañó de fuerte explosiones, según testigos citados por la radio Eco de Moscú, que en un primer momento creyeron que había estallado un avión en vuelo.

"No ha sido una lluvia de meteoritos, sino un meteorito que se desintegró en la capas bajas de la atmósfera", dijo a la agencia Interfax la portavoz del Ministerio de Rusia para Situaciones de Emergencia, Elena Smirnij. Agregó que la onda expansiva provocada por la caída del cuerpo celeste hizo saltar los cristales "en algunas viviendas de la región". 

La cadena Rusia Today, sin embargo, afirma que el sistema de defensa aéreo habría interceptado el meteorito, de tamaño todavía desconocido, y éste se habría dividido, cayendo en las ciudades de Chelyabinsk, Sverdlovsk y Tyumen. El trozo más grande habría afectado a la región de Chelyabinsk, que se ha quedado sin conexión telefónica y a Internet.

La portavoz ministerial y Rosatom, la agencia rusa para la energía atómica informó también de que la caída del meteorito no influyó en los niveles de radiación, que se mantienen dentro de los parámetros habituales para la región.

 "Definitivamente no era un avión", dijo a Reuters un funcionario de emergencias, que definió lo sucedido como "una poderosa explosión" que sacudió la región rusa de los Urales la madrugada de este viernes cuando "objetos brillantes", identificados posiblemente como una lluvia de meteoritos, cayeron desde el cielo.

Algunos habitantes de las regiones de Chelyabinsk y Sverdlovsk afirman haber visto caer objetos ardientes del cielo. Uno de los testigos del suceso ha afirmado a la agencia Reuters haber escuchado una gran explosión y haber sentido la supuesta onda expansiva posterior desde un edificio de 19 plantas en el centro de la ciudad tras el impacto del objeto.

Otros afirman que las alarmas de los coches empezaron a sonar de golpe, que muchas ventanas se rompieron y que los teléfonos móviles empezaron a funcionar de forma intermitente. Los trazos de la supuesta lluvia de meteoritos en el cielo se podrían haber visto, según algunos testigos, a unos 200 kilómetros de al sureste de Chelyabinsk.